Cómo entender la Ley del Turismo de Canarias
Las últimas manifestaciones que se han producido en Canarias en contra de la regulación turística no han pasado inadvertidas en el resto del país.
Las Afortunadas, desde hace unos años 8 islas y no 7, son origen volcánico y están bañadas por el Atlántico, cuentan con un clima subtropical, gozando de una temperatura media de 23°-24° todo el año, y una riqueza cultural y paisajística que hacen de ellas el destino turístico perfecto. No en vano, está en el top tres de la comunidad autónoma preferida entre los turistas internacionales que visitan España. El impacto económico que tiene el turismo es fundamental. De hecho, antes de la pandemia, el sector generaba cerca del 40% del empleo y el 35% del PIB en las islas.
No hablaré de lugares a visitar, porque no acabaría la lista.
Pero, para entender la situación actual, es necesario conocer la Ley de Turismo de Canarias, pues establece regulaciones específicas para las viviendas en zonas turísticas. Como, por ejemplo:
Viviendas vacacionales: El Reglamento de las Viviendas Vacacionales de Canarias, aprobado por el Decreto 113/2015, establece normas para el alquiler de viviendas con fines turísticos. Esta normativa excluye del ámbito de aplicación de la Ley de Arrendamientos Urbanos aquellas viviendas que se alquilan temporalmente y están amuebladas y equipadas para uso inmediato, comercializadas o promocionadas en canales turísticos y con fines lucrativos.
Especialización en uso turístico: La ley promueve la especialización de ciertas zonas hacia el uso turístico, evitando la residencialización. Esto afecta a quienes compraron apartamentos como segunda vivienda y desean alquilarlos por su cuenta o incluso a aquellos que ahora los habitan como única alternativa.
Requisitos mínimos: Las viviendas destinadas al uso vacacional y/o turístico deben cumplir requisitos mínimos de sostenibilidad, calidad y competitividad. Además, se establece que un porcentaje de la edificabilidad residencial debe destinarse a domicilio permanente (generalmente el 90%, aunque en las Islas Verdes se aplica el 80%).
Residencia en suelos turísticos: La Ley 2/2013 de Renovación y Modernización Turística de Canarias ha generado controversia entre los propietarios de viviendas en zonas turísticas. Según esta normativa, los dueños de viviendas en suelos con potencialidad turística no pueden residir en ellas si no pueden demostrar que lo hicieron antes de 2017.
Por tanto, recapitulando todo lo anterior, se aprecia que la normativa busca regular el uso turístico de viviendas en zonas específicas en Canarias y es aquí donde entran los conflictos, pues puede parecer que afecta a la propiedad privada. Por ello, la Ley de Turismo de Canarias además de regular el uso turístico de viviendas en áreas concretas, también debe equilibrar los derechos de los propietarios y el bienestar de la comunidad.
Aunque puede parecer que afecta la propiedad privad, por lo restrictivas que parecen las regulaciones, no hay que olvidar que el objetivo es proteger el interés general y el bienestar de la comunidad y para entenderlo es importante considerar algunos puntos:
Interés general: Las regulaciones turísticas se establecen en interés general para preservar el entorno, evitar la saturación turística y garantizar la calidad de vida de los residentes. Estos objetivos a menudo requieren restricciones en el uso de propiedades.
Limitaciones razonables: Las restricciones no deben ser excesivas ni arbitrarias. La ley debe encontrar un equilibrio entre los derechos de los propietarios y el bienestar colectivo. Por ejemplo, limitar el alquiler turístico en áreas específicas no necesariamente atenta contra la propiedad privada, siempre que se haga de manera razonable y justificada.
Compensación justa: Si las restricciones afectan significativamente el valor de una propiedad, la ley debe proporcionar mecanismos para una compensación justa. Esto podría incluir exenciones o indemnizaciones.
Finalizando, hay que ver todo el conjunto para entender la regulación normativa de la Ley del Turismo de Canarias, que zonifica, regula y compensa, para buscar un equilibrio social y de desarrollo turístico.
Joana Tremba
Abogada de MONLEX
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