El análisis de datos como elemento de disrupción en turismo
Entrevista con Gemma Muñoz, cofundadora y CEO de El Arte de Medir14 MAYO, 2020- "Cada vez toma más fuerza la idea de que los datos pueden explicar y predecir lo que debemos hacer para evolucionar o pivotar en el negocio"
- "El turismo fue uno de los primeros sectores que más rápidamente se adaptó a la gestión y aprovechamiento de los canales digitales"
- "Es momento de evolucionar para buscar el factor diferencial que permitirá a las empresas de turismo crecer"
¿Cómo vender el producto turístico en medio de una pandemia? ¿Qué factores serán determinantes a la hora de comercializar viajes, hoteles o excursiones? Las Jornadas Hosteltur: "Comercialización y marketing turístico poscovid-19", que Hosteltur celebrará el próximo 21 de mayo, tratarán de arrojar luz sobre estos temas.
Gemma Muñoz, cofundadora y CEO de El Arte de Medir, participará en las Jornadas Hosteltur: "Comercialización y marketing turístico poscovid-19", en la mesa redonda "Cómo aprovechar el análisis de los datos para mejorar las ventas". En esta entrevista adelanta algunas de las ideas que se debatirán en las jornadas.
¿Cómo de importante va a ser a partir de ahora el análisis de los datos para la gestión de los negocios?
El análisis de datos siempre ha sido importante para la gestión del negocio. Quien más,quien menos se ha apoyado en datos, además de en la intuición, para la toma de decisiones. Pero es cierto que cada vez toma más fuerza la idea de que los datos pueden explicar y predecir lo que debemos hacer para evolucionar o pivotar en el negocio.
Hemos de tener en cuenta que tras una crisis como la que estamos viviendo, los supervivientes no siempre son los más grandes o los más poderosos, sino los que se adaptan mejor a los cambios. Y las matemáticas siempre han sido el eje central para conocer la realidad compleja de cada negocio. La implicación de toda la compañía es esencial para obtener una cultura de datos global y poder ir más allá en la resolución de los problemas de gestión de negocios.
¿Crees que las empresas de turismo están preparadas para hacer frente a esta disciplina?
¡Por supuesto! El turismo fue uno de los primeros sectores que más rápidamente se adaptó a la gestión y aprovechamiento de los canales digitales, sobre todo motivados por el cambio en el comportamiento de compra del consumidor. Es momento de evolucionar para volver a buscar el factor diferencial que permitirá a las empresas de turismo crecer en un mundo con nueva normalidad y cada vez más competitivo.
La realidad es que, estudiando los datos de lo que ha pasado y el contexto, seremos capaces de predecir lo que puede pasar en el futuro y encontraremos la manera de prescribir acciones que nos lleven a producir un futuro mejor.
¿Cómo podrían estas empresas aprovechar este momento de crisis para sacar más potencial de sus datos?
Al igual que ocurriera en 2008, sectores como el turismo son de los más afectados por esta crisis, no sólo por los dos meses de confinamiento, sino también por la incertidumbre de lo que ocurrirá de cara a las vacaciones de verano o las nuevas normas de distanciamiento. No podemos controlar la evolución del Covid-19 pero, a diferencia de 2008, hoy contamos con herramientas con las que analizar en tiempo real lo que sucede con respecto a nuestra marca e ir amoldando nuestra estrategia a medida de los cambios que vayan surgiendo. Pero para ello necesitamos conocer bien nuestro negocio, ver los datos de los que disponemos, su calidad y hacer un plan de gestión donde vincular nuevas acciones con nuestras preguntas de negocio.
Es en momentos como el que estamos viviendo cuando tenemos una responsabilidad aún mayor con los datos. Debemos aprovechar esta situación y decidir como queremos usar y sacar rendimiento a nuestros datos. El análisis de estos está convirtiéndose en un elemento de disrupción, las decisiones han de ser tomadas a tiempo real para poder pivotar lo antes posible a lo que esté funcionando en esta nueva normalidad y garantizar que recuperamos el negocio.
Big data, small data, smart data... ¿con cuál nos quedamos?
Es una pregunta muy interesante ya que generan mucha confusión. Desde mi punto de vista, los tres términos parten más de una evolución de conceptos que de una diferenciación entre los mismos. Y me explico. Hay empresas que creen que hacen big data cuando únicamente se quedan en el primer paso, que es el de almacenar los datos en un data warehouse. Los avances tecnológicos permiten guardar y tratar estos datos de forma sencilla y relativamente barata.
Pero el proceso de big data debería continuar con el tratamiento, explotación y posterior análisis de estos con el fin de activar el dato y que deje de ser un pasivo (gasto) para ser un activo que ofrezca solución a las preguntas que nos plantea la gestión de nuestro negocio. Pero ¿tenemos que analizar toda la información que recogemos? En realidad, no. Es vital vincularla convenientemente a través de las métricas e indicadores más adecuados para dar respuesta a las preguntas.
Las herramientas tecnológicas por sí solas entonces dejan de ser suficiente, de ahí que necesitemos que la metodología de análisis entre en funcionamiento para producir toda la potencia que demanda la empresa. Esta metodología de análisis nos permitirá resolver un problema de negocio tras otro y solucionarlos mediante el tratamiento de smart data o small data, pero lo verdaderamente importante convertir los datos en conocimiento mediante la adquisición y aplicación de nuevos conocimientos.
La clave es combinar los tres conceptos: disponer de big data para garantizar que tendremos smart data o datos muy vinculados a cada pregunta de negocio de forma que lo podamos tratar y convertir en small data, del que aprenderemos y accionaremos de forma que el dato por fin se convierta en un activo del negocio.